viernes, 31 de enero de 2014

La cuadrilla de los once (1960)


Un par de años antes, 
Frank Sinatra y Dean Martin habían compartido cartel en Como un torrente (Vincente Minnelli, 1958), pero la película que reunió al "Rat Pack" al completo fue la penúltima que dirigió Lewis Milestone. Vista su trayectoria anterior (Sin novedad en el frente, El extraño amor de Martha Ivers o Arco de triunfo) se deduce que Milestone había vivido tiempos mejores a su encuentro con el quinteto de amigos que se citó en Las Vegas no por casualidad. Para los Sinatra, Martin, Sammy Davis, Jr., Peter Lawford y Joey Bishop (el menos problemático del grupo) la localidad de Nevada era un entorno habitual donde solían actuar tanto individualmente como en colectivo; de hecho, durante el rodaje fueron un reclamo artístico y turístico de primer orden para que la ciudad del juego se llenase de curiosos que pretendían ver sus actuaciones cada noche en el Sands, casino del que Sinatra y Martin eran accionistas. Más que una película la La cuadrilla de los once (Ocean's Eleven, 1960) fue la excusa perfecta para que estos "cinco magníficos" reuniesen a su alrededor a otros amigos como Richard Conte, Angie Dickinson, Henry SilvaShirley MacLaine, con quienes estarían encantados de participar en una producción que se podría definir como una irregular gamberrada para mayor gloria de Sinatra y Cia.


Desarrolla en tres partes,
La cuadrilla de los once se inicia con la presentación de los miembros del antiguo grupo del paracaidistas liderado por Danny Ocean (Frank Sinatra), quienes posteriormente se reúnen en la casa de Acebos (Akim Tamiroff), donde planifican un golpe aparentemente imposible. Durante esta primera parte predomina un tono cómico carente de humor, ya que el supuesto ingenio mostrado por Ocean o Foster (Peter Lawford), en sus continuos intentos de burlarse de Acebos, resulta más cargante que divertido. Concretado el plan y las funciones de cada uno de sus miembros, el equipo se traslada a Las Vegas donde deambulan por los cinco casinos que pretenden asaltar durante la noche de Fin de Año, cuando la ciudad sufra el apagón energético provocado por Bergdorf (Richard Conte). La parte final, supuestamente la más irónica, se pone en marcha después de apoderarse del dinero que transportan en el camión de la basura que conduce Josh Howard (Sammy Davis, Jr.). A partir de ahí el asunto se complica con la irrupción de Duke Santos (Cesar Romero), un tipo de dudosa reputación, y futuro padrastro de Foster, que los descubre y les exige la mitad del botín a cambio de su silencio. A lo largo de los minutos se acentúan los altibajos narrativos de La cuadrilla de los once, algo que por lo visto no quitó el sueño a Sinatra, máximo responsable de la producción, quien por lo visto se negaba a realizar una segunda toma cuando Milestone sugería que podría mejorarse la primera; quizá porque el cantante prefería no perder tiempo y continuar con la fiesta que significaba estar rodeado de un grupo de amiguetes con los que pretendía pasar un buen rato compartiendo otros intereses ajenos al mundo del espectáculo. Y por si quedase alguna duda de que se trataba de una película de y para la troupe Sinatra, en la imagen final se descubre tras ellos un cartel luminoso donde se lee el nombre de los cinco miembros del Rat Pack que cada noche actuaban en directo en el Sands.

1 comentario:

  1. Me encanta esta película, y las versiones nuevas (ocean´s eleven) me gustan mucho más.
    Pasate por mi blog http://todoloquenecesitasesmiblog.blogspot.com.es/2014/01/mas-premios-premio-liebster-award.html
    Te he concedido unos premios por tu gran trabajo en el blog.
    Enhorabuena
    Un saludo

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